Guillem Cifré
Nació en Barcelona en 1952. La profesión de su padre, Guillermo Cifré (Castellón, 1922-Barcelona, 1962), que perteneció a la escuela de dibujantes de historieta de humor de la Editorial Bruguera, fue determinante. Semejante influencia, reconocida por él mismo, es evidente y nada despreciable. Su padre fue el creador del reporter Tribulete, entre otros personajes, y en su entorno familiar fueron habituales otros dibujantes como Escobar, Conti, Peñarroya o Giner.
La carrera profesional de Cifré hijo se inició en los años sesenta en la revista Mata Ratos (1965-1977), una de las cabeceras que integraron el panorama gráfico durante la última década del régimen franquista y la Transición española. Mata Ratos comenzó su trayectoria como revista de historietas, humor y entretenimiento para mayores y acabó evolucionando hacia el humor picante y el destape. Es en esta última etapa de la revista cuando Cifré publicó en sus páginas, a partir de 1974. Colaboró asimismo en El Papus y en el semanario deportivo y satírico El Hincha Enmascarado. Y también frecuentó la corriente underground que se vivía en Barcelona a finales de la década de los setenta: colaboró con Los Tebeos del Rrollo y en revistas como Star o Propaganda Moderna. También supo moverse fuera de nuestras fronteras. En 1980 la editorial alternativa Real Free Press, de Ámsterdam, le editó un portfolio de ilustración con el título Zic-Zac. Ese año empezó a publicar en la revista El Víbora y, un año más tarde, en Cairo.
La colección «Misión imposible» de la efímera editorial Complot incluyó la primera antología de historietas de Guillem Cifré.
Cifré fue por entonces poco pródigo como historietista, acumulando una obra más bien escasa pero de gran entidad artística. Sus historietas de una, dos o tres páginas mantuvieron evidentes constantes temáticas mientras desplegaban diferentes propuestas estilísticas, tanto en lo gráfico como en lo narrativo. Lo más destacado de todas esas páginas se publicó en el álbum Modernas y Profundas (Complot, 1990), donde el hombre convencional, el ciudadano, se enfrenta y sufre la rebelión de los objetos o la naturaleza. En un ambiente cotidiano sus personajes se enfrentan a peripecias o anécdotas que en su mayoría culminan en el mejor surrealismo o existencialismo. Sus mejores piezas de esa etapa ofrecen una equilibrada proporción de humor siniestro, fantasía y desenlaces inesperados.
Cifré ha mantenido una presencia habitual en diarios y revistas, afianzando y afinando su estilo en el humor gráfico, la tira de prensa y la ilustración. Ha colaborado en El Periódico de Catalunya, Diari de Barcelona, El Mundo, El País, y en revistas como Europa Viva, Rock In, Primera Línea, y en otras revistas de historieta como TBO, Madriz, Complot, Viñetas o Nosotros Somos Los Muertos.
Su carácter extremadamente polifacético le ha mantenido ocupado durante estas dos últimas décadas en todo tipo de actividades gráficas: cartelismo, ilustración editorial, pintura, collage, instalaciones o intervenciones artísticas. Destacables son sus incursiones en la producción audiovisual: colaboró en el programa El Planeta Imaginario, que emitió TVE entre 1983 y 1986, donde realizó una sección denominada «Cómic» y diseñó las cabeceras y cierres del programa en su última etapa. Posteriormente también trabajó para TV3 en el diseño de decorados y en Canal+.
Una sencilla pero muy elegante edición de 2003 para el personaje recurrente en la obra de Cifré hijo.
Entre 2000 y 2003 publicó una serie semanal en la última página del suplemento DDD del diario Avuí, protagonizada por la máxima estilización de su personaje fetiche: un hombre común y corriente que ya había aparecido en la revista Viñetas en 1994. La recopilación de estas planchas, Historias de «El Tío del Final» (Glénat, 2003) obtuvo el Premio Junceda en 2004. Poco después mereció el mismo premio en su edición de 2006 por la recopilación Artfobia (Sinsentido, 2005), donde reunía las ilustraciones que había publicado en el mismo diario y que aglutinaban y destilaban parecidas obsesiones subconscientes pero ambientadas y dedicadas al mundo del arte, la cultura y las letras.
Su trabajo en torno al mundo del arte ha continuado en Avuí y ha contado con una segunda antología, Artfobia II (Edicions del Ponent, 2008), con la que ha merecido el Premio Nacional de Ilustración de Cataluña, recientemente instituido; este galardón ha reconocido la obra y la trayectoria de un autor que, sin perder de vista las claves del tebeo y el arte secuencial del que proviene, y en el que se formó, ha sabido destilar su estilo y poner en juego síntesis y efectividad gráfica hasta el nivel de maestro; además, destaca en el cuerpo de su obra una coherencia argumental poco habitual en autores de larga trayectoria.
Cifré continúa publicando en Avuí y recientemente ha participado en la antología Almanaque Ilustrado del Fin del Mundo (Edicions de Ponent, 2009).
Christian Osuna
https://cvc.cervantes.es/el_rinconete/anteriores/octubre_10/28102010_01.htm
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